jueves, 20 de diciembre de 2012

Quirófano: Diario reflexivo 2


Tras 5 semanas en quirófano y haber sido hoy un día neutro, he querido plasmar mis ideas e inquietudes de este servicio ya que no quería ser demasiado pesimista ni demasiado optimista dependiendo de lo que me hubiese pasado ese día
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A medida que pasa el tiempo me voy metiendo más en el papel de la enfermera de quirófano
Como ya cite en el diario anterior los días dependen de la enfermera que esté en quirófano, tengo días súper buenos en los que aprendo y disfruto y tengo días que me sigo sintiendo inútil.  Sé que cada enfermera es un mundo y que cada una tiene una idea de los estudiantes y respeto todas y cada una, pero aun así hay día que me siento ofendida ya que al igual que yo me aprendo el nombre de cada una de las enfermeras siendo estas muchas ( y aun no he conocido a todas ellas) me gustaría que ellas se aprendiesen el mío ya que únicamente tienen que aprenderse el de dos personas el mío y el de mi compañero David y aun llevando más de un mes en quirófano y habiendo estado con enfermeras más de un día en el mismo quirófano, siguen sin saber cómo me llamo. En muchas ocasiones y dependiendo de la enfermera, esta puede pensar que soy una pasota, que no me interesa y cosas así, pero eso no es la verdad, lo cierto es que en muchas ocasiones al sentirme inútil pierdo un poco el interés ya que cuando ellas se ponen a cargar medicación o no me dicen nada o si pregunto si puedo ayudar la contestación es “ah no da igual si ya casi termino vete con la otra a ver como prepara la mesa…”, al igual que con esto con otras cosas en las que “no necesita mi ayuda”, por eso llega un momento que con esa enfermera directamente no hago nada y me paso toda la mañana con la otra (en el caso de que esa sea buena, si no, “me muero de asco” esa mañana en quirófano).
Otros días me paso la mañana haciendo el trabajo de una auxiliar, que no me importa ni mucho menos porque dentro del quirófano somos un equipo. Además lo veo un trabajo importante y que a mí me puede servir de ayuda como enfermera para fijarme en las cosas desde otro punto de vista. El problema es que también hay estudiantes de auxiliares, entonces esos días no les voy a quitar su trabajo por lo que no hago nada.
Aun así no todo en el quirófano es malo, hay muchas enfermeras con las que he cogido mucha confianza y me dejan cargar medicación, canalizar catéteres, sondar, lavarme e incluso instrumentar sola. Me dan autonomía a la hora de tomar decisiones cosa que creo que a las alturas que estamos y lo poco que nos queda para terminar nuestro último contacto con el hospital como estudiantes es súper importarte. Al igual que como las enfermeras, hay cirujanos, auxiliares y celadores que me tratan como una más. Estos son los días por los que merece la pena ir a prácticas.

En cuanto al quirófano en sí, son unas prácticas bonitas y en las que se puede aprender mucho sobre instrumental, anatomía, anestesia, etc. si ambos, tanto enfermera como yo ponemos de nuestra parte. Además según pasan las semanas me doy cuenta que se más y más, para mi ser capaz de instrumentar cirugías yo sola, contestar a preguntas que me hace el personal, realizar técnicas que ya había hecho con anterioridad con existo, etc. es una gran satisfacción. Y en cuanto a la relación con el paciente además de ser escasa se produce en unas circunstancias especiales ya que el paciente va a ser anestesiado en breves momentos, por lo que el contacto tanto físico como verbal debe ser adecuado, siendo este desde mi punto de vista cálido, amable e intentado trasmitir tranquilidad y seguridad. 

       


 ß Quirófano de otorrinolaringología 
                               Mesa de anestesia à