Tras mis dos primeras
semanas en quirófano, sigo perdida en cierto modo.
Primero comentar que es
difícil empezar en un sitio nuevo sobre todo tan específico, es difícil orientarse,
aprender a moverse o incluso el relacionar donde están las cosas ya que todo
está tan protocolizado, pero en unos días y con interés todo se aprende.
En estos días he podido
observar y realizar las dos funciones de las enfermeras en quirófano, una
instrumentar las operaciones y dos como enfermera circulante preparando la
anestesia, medicación, imputando, etc. Creo que la función de la enfermera en
quirófano es importante, pero que perdemos la autonomía en cierto modo, no
podemos desarrollar el conocimiento que adquirimos durante la carrera.
Principalmente porque durante los cuatro años de carrera se nos enfoca al
cuidado del paciente y aquí el trato con el paciente es mínimo. Además lo único
que hacen las enfermeras por iniciativa es cargar la medicación de la
intubación ya que es para siempre lo mismo y monitorizan al paciente, el resto
va todo bajo órdenes médicas.
También hay que destacar que durante la carrera
en ningún momento se hace mención ni se nos explica nada de la especialidad de
quirófano por lo que no tenemos conocimiento alguno. Por ello creo que las
enfermeras al ver llegar estudiantes sin conocimiento ninguno de esta materia y
siendo su trabajo tan especifico tienen reparo en que intentemos hacer su
papel.
Me gustaría decir
que personalmente hay días que disfruto, me siento super útil y salgo del
hospital pensando que puedo llegar a servir para eso (aunque no sea lo que más
me gusta de la enfermería). Pero otros días salgo desmotivada, con ganas de no
volver. Todo esto tiene mucho que ver con las enfermeras y enfermeros con los
que estoy ese día en quirófano. Todavía no he conocido a todas pero la mayoría
ya me conocen, además siempre me he presentado como una estudiante de 4º de
enfermería, por lo que saben que tenemos bastante conocimiento de medicación,
de patologías, de técnicas…
Hay días que los enfermeros
me dejan preparar la medicación, me dejan preparar el material, lavarme e
incluso instrumentar las operaciones. Pero otros no me dejan hacer nada, me
paso la mañana preguntándoles si les puedo ayudar si puedo hacer algo pero no
me dicen nada, aun así me intento ir con la enfermera que más me atiende y me
deja hacer. Un claro ejemplo con el que me he sentido bastante inútil ha sido
estando en quirófano, una de las enfermeras tras preguntarme si sabia sondar a
un hombre y contestarle que sí, me dice que me prepare para hacerlo, y mientras
estoy esperando para sondar y teniendo preparado todo, llegó la otra enfermera
y sondó sin decir nada, además cogió la vía periférica sin avisarme, no me
dejaba ni cambiar los goteros… Al igual que este ejemplo hay varios más, cada
enfermera es un mundo y algunas quieren estudiantes para enseñar y que les
ayudemos, y otras no quieren ningún tipo de relación con nosotros. Sé que
personas así encontraremos siempre y entiendo que si fuese una estudiante
pasota o que no me interesa aprender no me hiciesen ningún caso, pero por lo
contrario me considero una estudiante que muestro interés y que me gusta
aprender y conocer cosas nuevas para intentar salir lo máximo formada y habiendo
vivido distintas experiencias antes de salir al mundo profesional.
Respecto al funcionamiento
del servicio de quirófano, lo veo bastante organizado, con un poco de falta de
material o mejor dicho las cajas de material están un poco mal organizadas
porque para cada operación debemos abrir dos cajas ya que una sola no trae todo
lo necesario. El equipo está coordinado y la mayoría de ellos motivados.
En cuanto a mi desarrollo
profesional y personal creo que puede ser muy grande ya que quirófano es un
servicio que no todo el mundo tiene la oportunidad de pasar y ver su
funcionamiento, además estoy adquiriendo conocimientos que en la carrera no me
han impartido y estoy viendo cosas que en otro servicio es casi imposible
verlas. Aunque el trato con el paciente no es del todo como a mí me gusta, es
muy impersonal, muy mecanizado, y sin embargo yo intento preguntar y hablar un
poco con el paciente porque unas palabras de tranquilidad, una sonrisa o un
buen gesto hace que la expresión del paciente cambie y se sienta más a gusto.
Espero que en el resto que
me quedan de prácticas tenga más días buenos que malos y que coincida con
enfermeras y enfermeros que me hagan participes de todo lo que ocurra.